Es una pagina muestra que las historias mitos, leyendas música y lenguas como parte fundamental de nuestra cultura donde forma parte de la vida familiar y social de los pueblos, razón por la cual, están relacionados con sus creencias y las de otras latitudes; Sin embargo, para tener un mejor conocimiento sobre la vida y las costumbres de nuestros antepasados, es necesario explorar en su entorno cultural y legado que hemos recibido de ellos, generalmente, a través de la transmisión oral por generaciones. Va dirigido al desarrollo intelectual familiar el cual sea fuente de conocimiento y aprendizaje.
Es importante para el enriquecimiento familiar con una mira al pasado como muestra de los grandes campos sociales culturales y políticos que surgieron en estas épocas, que hacen parte de nuestra vida diría y que de alguna u otra manera marcaron la vida familiar de un modo indirecto.
Esta pagina es de interés educativo familiar fomentado en habito de lectura en los padres donde se formen como seres investigadores con el fin de crear interés hacia una historia rica en diversidad de culturas y creencias históricas que nos hicieron crecer desde una escuela basada en la autonomía de nuestros ancestros.
La finalidad de esta página es ofrecer a los padres una forma en la cual se transmita una historia, mito o leyenda acerca de las regiones colombianas donde la vinculación familiar sea considerada como primeros sujetos hacia el desarrollo de su participación intelectual y cultural
Una vez que comprendas su funcionamiento y los principios básicos, serás capaz de ayudar en mayor medida a sus hijos, para que estén seguros en el momento de socializar el tema histórico de su interé
Transmitir una historia, mito o leyenda acerca de las regiones colombianas donde la vinculación familiar sea considerada como primeros sujetos hacia el desarrollo de su participación intelectual y cultural.
Crear un habito de lectura en la cual los padres puedan adquirir un conocimiento histórico de región de su interés fomentando así la contribución a la búsqueda de nuevos saberes y colocar este habito como fuente de aprendizaje a nivel personal como familiar.
Formar familias participativas y armoniosas donde la historia y cultura colombiana sean la base de la educación para sus hijos, esta pagina busca satisfacer una necesidad familiar con miras educativas .
Fue alrededor del río Magdalena donde se econtraron las primeras huellas de presencia humana en Colombia. Reliquias de una civilización casi desconocida, que data de los últimos cinco siglos A.C., fueron descubiertas en San Augustín, cerca del origen del río, en los Andes colombianos: estatuas de piedra, bajorrelieves, cámaras funerarias y santuarios, en un estilo que recuerda a veces al de los aztecas.
Siglos más tarde, antes de la llegada de los españoles, las altas mesetas del este, cerca del río Magdalena, estaban habitadas por una tribu amerindia, los Chibchas. Buenos agricultores, eran también excelentes orfebres y se han encontrado cantidades de pequeños objetos (collares, figuras) en oro o en tumbaga (una aleación de oro y cobre), que datan de 1000 a 1500 a.c.
En 1502, en su primer viaje al Nuevo Mundo,Cristóbal Colónexploró una parte del imperio de los Chibchas, en las costas septentrionales de la actual Colombia. Tras sus pasos, los conquistadores españoles establecieron en Darién, en 1510, su primera colonia sobre el continente americano. Atraidos por este nuevo "eldorado", los colonos progresaron rápidamente. En la costa, en primer lugar, fundaron Cartagena, después, Santa Marta. Hacia el interior, a continuación; Santa Fé de Bogotá - que sería más tarde Bogotá - fue conquistada por Gonzalo Jiménez de Quesada, en 1538.
La región fue, a partir de 1544, integrada al virreinato del Perú, antes de ser, en 1740, el centro del virreinato de la Nueva Granada. La economía de la colonia reposaba entonces, en gran parte, sobre la esclavitud: a los indios sucedieron los esclavos negros. También se sirvió de los recursos naturales del territorio (esmeraldas y otras piedras preciosas) y la presencia del istmo, que aseguraba el esplendor de las ciudades portuarias.
Sin embargo, los españoles, que acaparaban las riquezas, se toparon con la hostilidad creciente de los indígenas. La revuelta de los comuneros de Socorro, en 1781, fue la primera manifestación de la identidad criolla y el preludio de los movimientos por la independencia. Los insurgentes marcharon entonces a la capital, para protestar contra los nuevos impuestos de los españoles y reclamar su parte de la riqueza nacional. Desde entonces, el pueblo de Nueva Granada hizo parte del movimiento por la independencia que nacía en el conjunto del Imperio español.
En 1810, las provincias de la Nueva Granada se reunieron en federación y decidieron romper con España. Frente a la represión dirigida por las autoridades españolas, el deseo de independencia fue sofocado por un tiempo. Sin embargo, los éxitos militares deSimón Bolívarsobre los españoles, un poco por todo el continente, devolvieron las esperanzas a los independentistas. Así, el 7 de agosto de 1819, el general Bolívar obtuvo una victoria decisiva en la batalla de Boyacá. Una vez en Bogotá, proclamó entonces la independencia de la Nueva Granada.
Algunos meses más tarde, el Congreso de Angostura (17 de diciembre de 1819) dio nacimiento al estado de Gran Colombia, que reunía la Nueva Granada, la actual Panamá y, después de su liberación, Venezuela y Ecuador. Esta experiencia no sobrevivió a su inspirador y, en 1830, después de la muerte de Bolívar, Venezuela, después Ecuador, hicieron secesión.
Desde los primeros años de la independencia, el país estuvo dividido en dos bloques políticos que se enfrentarían durante décadas. Por un lado, los conservadores, sostenidos por la Iglesia, partidarios de un estado centralizado; por el otro, el bloque liberal, federalista, que quería sustraer la política de la influencia de la religión. Las primeras décadas que siguieron a la independencia estuvieron marcadas por varias guerras civiles y por frecuentes cambios constitucionales.
En 1858, el país fue dotado de una constitución semi-federal y la nueva República fue bautizada Confederación Granadina. Cinco años más tarde nacían los Estados Unidos de Colombia, sobre el modelo decididamente federal del vecino norteamericano. Después de algunos años de relativa estabilidad, una nueva guerra civil estalló en 1876. De retorno al poder, los conservadores impusieron al país, en 1886, una constitución centralista, la de la República de Colombia, que quedó en vigor hasta 1991.
La segunda mitad del siglo XIX se caracterizó por numerosos cambios, que marcaron profundamente la sociedad: la abolición de la esclavitud en 1851; luego, en 1853, la separación de la Iglesia y el estado.
En 1903, empujado por los Estados Unidos, Panamá accedió a la independencia. Colombia perdió entonces un acceso importante al comercio marítimo; sin embargo, las compensaciones financieras acordadas por Washington le permitieron asimismo iniciar la diversificación de la economía, que reposaba hasta entonces esencialmente sobre el comercio del café.
Hasta 1930, Colombia tuvo un período de estabilidad política y pudo consagrarse a su desarrollo económico. La construcción de rutas, desde principios del siglo, permitió un comienzo de la expansión comercial. La explotación de los yacimientos de petróleo y el cultivo de café tomaron también amplitud. Los liberales, de regreso al poder en 1930, se comprometieron en nuevas reformas. Hasta la renuncia, en 1945, del presidente Alfonso López Pumarejo, hicieron votar una ley de reforma agraria, el reconocimiento del derecho de huelga y los derechos sindicales, un salario mínimo y vacaciones pagas.
Un modo de ver la acontecimientos historia de Colombia de modo animado donde la familia pueda compartir el entorno de la historia con sus hijos aprendiendo y disfrutando ,, la historia de colombia es una nación relativamente nueva, cuenta con menos de 200 años de historia como republica y al igual que el resto del continente americano, sus orígenes como estado se remontan a solo un poco más de cinco siglos. Sin embargo, a pesar de su corta existencia como nación, son varios los sucesos significativos que se han presentado; en esta sección encontrarás información sobre la historia de Colombia partiendo desde la época precolombina hasta nuestros tiempos. Es así como el profesor super O nos la relata
Colombia es un país pluriétnico, es mestizo, blanco, negro, mulato e indígena, por lo que presenta a lo largo y ancho de su territorio una gran diversidad cultural, e historia que constituye en si misma su riqueza y marca las características de su identidad nacional.
Este amplísimo marco cultural, que tiene sus raíces en las culturas precolombinas, es el entorno natural de la cultura colombiana que ha sido determinada tanto por factores sociales, ambientales, climáticos como por la configuración geográfica.
En cada región del país se arraigó un tipo humano con sus propias características. Como una historia propia y una leyenda que lo marca como representante de su cultura.
podemos identificar en cada región :al norte, la costa atlántica habita gente extrovertida y alegre y se ha conformado una región que incluye además de negros, mulatos y blancos, tribus indígenas como los Wayuu de la Guajira, los Kogi de la Sierra Nevada de Santa Marta y los Cuna del Golfo de Urabá. En la costa sobre el Océano Pacífico se asentaron comunidades de raza negra, pueblos de pescadores y cazadores que habitan a orillas del mar y en la selva húmeda de mayor diversidad del mundo, la del Chocó, y que también es cuna de tribus indígenas como los Emberá y los Noanamá. Al sureste, la exuberancia de la selva amazónica, cálida y húmeda ha sido durante siglos el hábitat natural de numerosas agrupaciones, con sus mitos y leyendas, conformadas por grupos dedicados a la caza, la pesca, con formas de vida comunitaria y a veces nómada como los Sibundoy, Makuna, Tukano y Tikuna. Al este, en los llanos del Orinoco y los inmensos ríos de la gran sabana se han desarrollado sociedades basadas en la agricultura y el pastoreo y asentamientos indígenas como los Guahibo, que todavía habitan las orillas del río Vichada. En el centro, en la cordillera de los Andes, dividida en tres ramales y densamente poblada, se albergaron sociedades con marcadas diferencias culturales y grandes capacidades para la agricultura, la alfarería y el tejido y tribus que hoy conservan tradiciones seculares como los Guambianos, los Pijaos y los Paeces.
Cada expresión regional tiene sus valores, su música, sus tradiciones y todas se funden en un carácter único de colombianidad. Las manifestaciones de ese carácter muestran su diversidad. La expresión musical, por ejemplo, mezcla ritmos e instrumentos europeos de tradición histórica propia, con danzas y ritmos africanos como son los casos de la cumbia y el vallenato en la costa Atlántica, el currulao y la jota en el pacífico, el bambuco o la guasca en el interior andino y el joropo llanero, pasando por una gama enorme de ritmos y variaciones interpretados con instrumentos propios tales como las gaitas fabricadas con cañas y cera de abejas, las marimbas, tiples y bandolas o los más sofisticados y modernos instrumentos musicales.
Definir qué es un mito (del griego, muthos) no es, desde luego, tarea fácil. Una definición entregada por la Real Academia de la Lengua, señala que el mito es una “narración maravillosa situada fuera del tiempo histórico y protagonizada por personajes de carácter divino o heroico. Con frecuencia interpreta el origen del mundo o grandes acontecimientos de la humanidad.” Y agrega que es una “Historia ficticia o personaje literario o artístico que condensa alguna realidad humana de significación universal”.
Mito
A partir de esta definición, podemos agregar que los mitos son relatos que cuentan cómo se crearon los cielos, de dónde provienen los vientos o cómo nacen los propios dioses; los mitos nos transportan a un tiempo sagrado distinto al nuestro, más abierto a los hombres como su propio horizonte.
LEYENDA
En definición de la Real Academia de la Lengua, leyenda es una “relación de sucesos que tienen más de tradicionales o maravillosos que de históricos o verdaderos”.
La leyenda es una narración ficticia, pero basada en la realidad, ligada a temas de héroes, de la historia patria, de seres mitológicos, de almas, de santos o sobre los orígenes de hechos varios.
La leyenda es un relato hablado que se conserva en la tradición oral de un pueblo. Indica lugares con precisión y en su origen tiene antecedentes históricos. Por lo mismo, sus personajes son identificables, aunque nunca iguales al personaje o hecho en el cual se basan. Posteriormente, la leyenda pasa a la escritura, con lo cual se fija, perdiendo una de sus características: la capacidad de transformarse.
La leyenda pertenece al folclore y por ello corresponde a la más arraigada sabiduría de un pueblo.
Expresa los deseos, los anhelos, los temores, los ideales y sueños que son parte de la visión global que tiene ese pueblo de su propia historia y de sus relaciones con la naturaleza.
Cuando se hacen estudios históricos, etnográficos, sicológicos, sociológicos y geográficos es necesario recurrir también a la leyenda para ver cómo la colectividad percibe su forma de ser y su medio.
La leyenda no pretende explicar lo sobrenatural; es un relato que, a partir de hechos y personajes reales, hace resaltar algún atributo o característica de un pueblo, región o ciudad.
La leyenda no pretende explicar nada, sino relatar un suceso. Tiene un fin moralizante y es didáctica.
Si bien transcurre en un tiempo histórico reconocible, la leyenda se diferencia de la historia porque ésta son hechos comprobables, mientras que nadie puede probar que lo narrado en una leyenda haya ocurrido realmente, y porque la historia se conoce por la escritura, a diferencia de la leyenda que se difunde oralmente
Los Mitos y las Leyendas son una de las costumbres más importantes del pueblo colombiano.
Hacen parte de la tradición oral de los pueblos que se encargaron de unir la fantasía con
las creencias populares, el resultado fue una serie de cuentos que han ido evolucionando
a través de los siglos.
Son fantasías que fueron tomando forma gracias al imaginario colectivo y se han encargado de proporcionar las primeras explicaciones no científicas de fenómenos naturales. En esta sección encontrarás los principales mitosy leyendas de Colombia;
La música colombiana es una evidente muestra de la diversidad cultural de nuestro país, ella contiene numerosas manifestaciones que identifican claramente cada región del territorio, aunque es muy frecuente encontrar varios estilos musicales dentro de una sola región, debido principalmente a los diferentes factores que influenciaron la cultura.
Dentro de los principales ritmos musicales de Colombia sobresalen la Cumbia, Porro, Bambuco, Vallenato, Mapalé, Rajaleña, Guabina, Joropo, Currulao, San Juanero, Torbellino y la Champeta.
ORIGEN DE LA MÚSICA COLOMBIANA
Para comprender el desarrollo musical de , es necesario tener en cuenta las condiciones sociales en las cuales se ha venido formando nuestra nación a partir de tres culturas: La aborigen americana, la española y la africana.
Influencia española:
Las expediciones españolas fueron regimientos de hombres de diferentes clases sociales y niveles de cultura, que luego de los prolongados viajes, encuentros sangrientos y pasajeras alianzas con los aborígenes, se dieron a la tarea de tener relaciones con las mujeres indígenas; esta situación se presentó debido a que los españoles no enviaron al principio familias, matrimonios o mujeres en sus expediciones.
Con la creación de los centros coloniales y el éxito de las grandes haciendas, la mezcla entre españoles e indígenas a nivel popular aumentó y se difundió, pero no dejo de ser una situación de desventaja y verguenza para los nacidos de estas uniones, a los cuales despectivamente se los llamaba "mestizos", que no gozaron de libertades o buenas garantías sociales. Pero esta mezcla no fue sólo de razas; recordemos que los aborígenes colombianos y los españoles tenían su propio idioma, religión, danzas,, artes y principios morales que comenzaron a influirse mutuamente para originar una cultura mestiza.
Influencia Africana:
Los aportes culturales africanos nos han llegado en dos épocas diferentes y en condiciones sociales distintas. Los primeros, se iniciaron con los rabes del Norte del África y su invasión y dominación de España (siglo VIII al XV D.C.); los españoles asimilaron durante 800 años buena parte de la cultura Afro-arabe y luego nos transmitieron esos valores culturales a partir del siglo XV D.C.
Los segundos aportes se iniciaron a partir del siglo XVI con la llegada de los esclavos africanos, recibiendo nosotros su influencia en forma directa. Dada la destinación de los esclavos (minería, ganadería y agricultura), los sectores de los ríos Magdalena y Cauca y la costa Pacífica. Si bien es cierto, el comercio de los esclavos africanos comenzó a disminuir en el siglo XVIII y se frenó en el siglo XIX con la ley de la abolición de la esclavitud, la cultura africana continuó mezclándose con la española y en algunos sectores con la indígena, hasta transformarse actualmente en una de las raíces profundas de nuestra cultura colombiana.
La costa atlántica y su música
Esta región fue clave como punto de contacto y partida de expediciones conquistadoras y área de fomento del comercio. Por eso, allí aparecen antiguas y poderosas ciudades como , Santa Marta, Riohacha, Valledupar y Mompós donde se fusionaron indígenas, españoles y esclavos africanos.
Las fiestas y la música religiosas española en honor de la Virgen (La Candelaria, losRemedios, La Inmaculada), la Cuaresma, Corpus Christi, San Juan y La , sirvieron para catequizar indígenas y esclavos y comenzar el mestizaje musical, en el cual también influyeron las tertulias y bailes en las de los españoles acaudalados en donde danzas europeas cortesanas como la gavota, el rigodón, paspiés, pasacalle, contradanza y populares como la jota, el fandango y las seguidillas fueron lentamente asimiladas y transformadas por indígenas y africanos.
Los cantos vallenatos
Se iniciaron con antiguos cantos de vaquería propios de las zonas ganaderas de Valledupar, en donde el tambor de un solo parche, llamado ahora "caja" se unió a la guacharaca para servir de base a narraciones cantadas, que hablaban de las penurias y anhelos del campesino, reflejaban la crítica social o la visión picaresca y alegre de esos pueblos costaneros. Tal parece que sufre influencia de ciertos aspectos melódicos de los arhuacos y guajiros, luego de los africanos y de los europeos, de estos últimos con las coplas y décimas y con su aporte reciente del acordeón de botones.
Música de los andes colombianos
Los festejos religiosos de Navidad, Corpus Christi, San Juan y las peregrinaciones a los santuarios de la Virgen (Chiquinquirá, Monguí, Chinavita), sirvieron para unir en el ámbito popular a los españoles y los indígenas; para crear hacia el siglo XVII el torbellino, los cantos de la guabina y gran cantidad de danzados.
Nacimiento del Bambuco
Los bailes de fandango, la tirana, el bolero y la seguidilla de la provincia de Andalucía, fueron muy populares entre la clase media española asentada en el territorio de Colombia. Estos Bailes constituyeron el punto de partida para la creación de fandaquillos criollos y el capituco, que evolucionaron y se diversificaron en el siglo XIX, gracias a los aportes indígenas y africanos existentes en los antiguos departamentos de Antioquia y Cauca, que se convirtieron en la cuna colombiana del bambuco.
Del vals al pasillo andino
En el siglo XIX en Europa, se propagó desde Viena (Austria) la música y danza de ón llamada waltz (vals) que al llegar a nuestro país se comenzó a distinguir con el nombre de "el strauss”, nombre tomado del apellido del famoso compositor de valses Johan Straus. Gracias a la sensibilidad artística de nuestros músicos, este aire musical se fue transformando en el "vals del país" o el "colombiano" y más recientemente en el "pasillo".
De los refinados salones de las principales ciudades colombianas, pasó a las plazas públicas y allí se convirtió en el "pasillo fiestero" que ha llegado a ser pieza obligada de las bandas de pueblo. Por último, es importante resaltar que la alianza entre nuestros poetas y compositores le ha dado al pasillo una alta calidad expresiva que se manifiesta de muchas formas en estos sentidos y conmovedores cantos del alma colombiana.
Costa pacífica colombiana
El trabajo de los esclavos africanos hizo prosperar las grandes haciendas del viejo Cauca (Chocó, Valle, Cauca, Nariño) y su mano de obra en las minas significó primero un enriquecimiento para la corona española y luego para los grandes terratenientes criollos. Las culturas africanas llegadas a esta costa fueron sensibles a la influencia cultural española, lo cual explica la gran asimilación y reinterpretación que hicieron de ella.
Dados los lujos de la aristocracia caucana, la música y la danza cortesana de Europa fue muy frecuente en sus tertulias y saraos (bailes) en donde se distraían al ritmo de danzas, contradanzas, mazurcas, polcas, jotas y algunos romances a cargo de señoritas aficionadas al canto. Es importante mencionar el que desempeñó un reducido número de esclavos dedicados al servicio doméstico, pues su contacto directo con la música y danza de sus amos, les permitió iniciar el proceso de asimilación, difusión y cambio de estas manifestaciones culturales europeas.
La religión católica con sus festividades de San Juan y Navidad, influye profundamente en el canto religioso popular de los esclavos, que gradualmente fueron substituyendo divinidades y ritos por salves a la Madre de Dios, trisagios, arrullos a los santos y al Niño Dios, balsadas fluviales y en honor a San Juan y para la Navidad.
El aporte cultural africano más fuerte y arraigado está en el currulao y el bunde, en el grupo musical constituido por marimbas de Chonta, conunos macho y hembra, bombo y el antiquísimo canto antifonal africano a cargo de las "cantaoras" y "repondeoras" que se acompañan con los guases (maraca tubular africana).
Música de los llanos orientales
Los aborígenes fueron tomando a su manera y sentir el canto popular español y los instrumentos de cuerdas (guitarricos, vihuelas, violines, arpas) que introdujeron los jesuitas y fueron mezclándose con carracas, maracas (capachos), y aun tomando la popular zambumbia de los campesinos españoles emigrantes.